Sorpresas te da la vida.
Pues en Málaga me hayo, haciendo tiempo como malamente puedo hasta coger el bus a Cádiz. Llevo unos días embarcado y he descubierto, fíjese usted, que no soy funcionario; no señor, ni mucho menos. A medida que pasa el tiempo de prácticas y voy conociendo mejor el oficio llego poco a poco a la conclusión de que mi actual profesión es la de pirata, así, a lo loco pero sin moño, jeje.
La gente de aqui tiene ese deje bucanero que sólo puede acompañar al que tiene por profesión abordar pesqueros, planeadoras, yates, gomas y en general cualquier cosa que flote; con nocturnidad, alevosía y, perdónenme ustedes la expresión, un par de cojones.
Así que no me queda otra que apalabrar unas libaciones a la salud de la marineria del Fulmar, todos gallegos y asturianos(unos por nacimiento y otros por adopción). A vuestra salud mes braves!!