Camino...
El verano ha llegado, a penas hace unos días, y parece que está dispuesto a quedarse. El mar ya se ha vuelto perezoso e, inevitablemente, el surfing empiza a intalarse más bien en mi mente y no tanto en mis piernas...Soy tan friki como el que más, y la verdad es que pienso, entre ensoñaciones de olas cavernosas, en cual es para mi la esencia de todo esto.
Me arrastro por el pasillo, todavía las marcas de las sábanas tatuadas en la cara. Enciendo el ordenador. Todavía no veo con claridad; sonrío a mi reflejo en la pantalla, "demasiadas cervezas..." concluyo. Prediciones: nudos, metros, periodos...Montalvo funcionará el viernes? Si, si, tiene que ser, lo deseo.
Deseo; busco mi felicidad entre unos y ceros.
Luego vendrá el coche. Suso, Félix, Ciego, Oscar: en fin, el aquelarre nuestro de cada día. Hablamos del viento, de la marea. Cada uno deja caer brevemente el lugar donde cree guardar sus secretos...Río, Ladeira, Doniños...Montalvo. Lo hacemos con forzada indiferencia, pero cuando dos se encuentran anhelado la misma dama sus miradas ríen con infantíl conplicidad...
Ocho y cuarto de la tarde; baja la marea y el viento amaina. El agua está fresca, no fría. Paso la primera espuma y se que estoy en casa. Mirar, observar, esperar. No remes la primera de la serie. Espera.
El mundo entra por mis ojos; el mundo sereno y quieto. El mundo siempre en movimiento. Pintado con brochazos, vivo, como un cuadro de Van Gogh. Adivino unas lomas en el horizonte. Me aparto. Remo hacia el pico.
...Dos, tres, cuatro...me empieza a llevar. Un ligero viento terral hace ondear su melena cuando pequeñas gotas acarician mi cara. De pie, estoy de pie...Fluir...no sólo eso.
Buscar. Trazar un camino. Sentir, ver, escuchar...viajar al centro, al centro de mi mismo. Los pies avanzan, mi alma se mueve. Quiero encontrar ese trocito de mi, ese claro de luna donde no soy más que una mota en el aire, una partícula en suspensión bailando alegre, una corchea en una gran sinfonía...y sin embargo el universo entero no es más que una extensión de mi cuerpo.
...Allí, allí quiero estar. Subir, quedarme un momento. Luego buscar tu mano, tu cuerpo. Tumbarme y buscar aquí otra vez, en tu divina corporeidad sumergido. Despues volver a mi, volver a lo múltiple. Buscar tu mirada en un bar, encontrarla, escuchar a mi alma reir...
Por eso busco; por eso trazo un camino. Lo ando y lo desando. Lo apunto en papeles, lo borro, lo vuelvo a definir. Surfing, música, amor...hay alguna difencia? Todo es camino. Camino al centro de ti. A lo único. Al infinito.